La mejor respuesta
Acostarse con el estómago vacío puede afectar significativamente su sueño. Todo tiene que ver con las sustancias químicas naturales de su cuerpo. En pocas palabras, el hambre mantiene alerta al cerebro. Es su forma de decirte «no duermas, ve a buscar algo de comida! ¿No ves que tenemos hambre? » Es un mecanismo útil que está destinado a garantizar que su cuerpo obtenga en todo momento los nutrientes que necesita para funcionar correctamente y, en última instancia, sobrevivir.
Analizando un poco la ciencia, cuando comemos, se libera leptina en el organismo y le indica al cerebro que el hambre fue satisfecha. Los científicos creen que la leptina tiene el poder de suprimir la secreción de grelina, comúnmente conocida como «la hormona del hambre». Por lo general, estas dos hormonas están en equilibrio. Pero cuando nos morimos de hambre, este delicado equilibrio puede romperse, lo que puede resultar en signos sutiles que nos despiertan varias veces durante la noche. Entonces, si bien es posible que no sienta ningún dolor de hambre o que no necesariamente sienta mucha hambre, su cuerpo evalúa constantemente su reserva de energía y el cerebro enviará señales cada vez que sienta que se está vaciando. Y eso puede mantenerte despierto por la noche.
Sobre qué comer para disfrutar de un sueño reparador, he escrito más en mi respuesta a otra pregunta, aquí.
Respuesta
Mucha gente cree que acostarse con el estómago vacío es una buena forma de adelgazar, pero esto no es cierto, porque la alimentación es necesaria para que el cuerpo descanse bien. No hay nada peor que despertarse del ruido en el estómago cuando los espasmos del estómago vacío no permiten dormir.
Esta teoría errónea se basa en la hipótesis de que «todo lo que comemos en la cena, se convierten en kilos de más «, por lo que es mejor irse a dormir con el estómago vacío. Sin embargo, la sensación de hambre hará que vacíemos el frigorífico por la mañana o incluso nos levantemos a media noche para «comer». Todo esto tiene un efecto negativo en el cuerpo, porque la recepción no se limita, por ejemplo, solo a una Apple. Por el contrario, una persona en tal situación querrá un frito bastante abundante u otro alimento alto en calorías. El funcionamiento de los sistemas del cuerpo humano da la mejor respuesta a la pregunta de qué opción elegir. Los expertos no apoyan situaciones extremas y le aconsejan que elija el medio dorado: cenar unas horas antes de acostarse. Si la cena es demasiado tarde, no te niegues las ganas de comer. Al mismo tiempo en lugar de los bocadillos y otros snacks productos más ligeros: una pequeña cantidad de sopa, yogur con cereales, tostadas y té, etc. Pero en cualquier caso no te acuestes con el estómago vacío.
Los estudios demuestran que el intervalo ideal entre el final de la cena y la hora de acostarse es de una hora y media. En este momento puede lavar los platos, leer, dedicarse al estudio, ver la tele (no es necesario que se deje llevar demasiado), hablar con los familiares para limpiar, preparar la ropa para el día siguiente, etc. Cena preferida, rico en carbohidratos, bajo en grasas. Elimine las grasas saturadas en los alimentos, ya que ralentizan el proceso digestivo y provocan pesadez, hinchazón y formación de gases, lo que complicará su sueño. La decisión de acostarse con el estómago vacío tiene graves consecuencias, especialmente si se repite constantemente.
Si llega tarde a casa del trabajo o la escuela y no está seguro de si optar por una cena tardía o por Resiste la tentación de acostarte de inmediato, elige la primera. Considere que es mejor comer algo ligero antes de acostarse que quedarse dormido con hambre. Según investigaciones científicas, este último puede provocar insomnio y problemas con la formación y restauración de la masa muscular durante la noche. El hambre hace que nuestro cerebro esté en un estado de excitación y ansiedad. La falta de sueño adecuado conduce a una disminución del metabolismo y un aumento en el nivel de la hormona grelina, que provoca el apetito. Así que por la mañana corre el riesgo de comer mucho más de lo normal, sin darse cuenta de la cantidad y calidad de los alimentos.
Al acostarse con el estómago vacío, puede enfrentar trastornos del sueño y su cuerpo no estará capaz de regenerar los músculos. Nuestro cuerpo está diseñado de tal manera que cuando no recibe suficientes nutrientes, utiliza la masa proteica de sus propios músculos para reponer energía. Entonces, si desea perder peso, no deje de cenar y salte otras comidas. Podría ser peligroso.